La vivienda es un componente fundamental en la calidad de vida de las personas mayores y el principal instrumento para permitir el envejecimiento integrado en sociedad. El envejecimiento en la vivienda ofrece continuidad respecto al ciclo vital, construyendo así una concepción en positivo de la vejez, de modo que permite su vivencia como etapa de continuidad y no como ruptura. No obstante, este proceso integrador de la vejez a través de la vivienda quedará condicionado por las características residenciales. Esta investigación ahonda en la importancia del proceso de envejecer en la vivienda desde la dimensión del actor, analizando la vulnerabilidad residencial y su distribución entre los mayores, así como las estrategias llevadas a cabo para continuar la autonomía residencial. Mediante la aplicación de un indicador multidimensional se desvela una situación de fuerte desigualdad en España, con un número elevado de personas que registran problemas graves de habitabilidad en el interior de sus viviendas. Esta vulnerabilidad dificulta su permanencia y participación en la sociedad, apuntando además a un mal funcionamiento del sistema redistributivo y residencial. El análisis de caso sobre las respuestas ante estas situaciones señala que los hogares mayores llevan a cabo estrategias caracterizadas por una escasa eficacia en un contexto de recorte de recursos públicos y cambio de la dirección de la solidaridad familiar, dando lugar a la pervivencia de desigualdades. Estas situaciones de exclusión contrastadas no se presentan como producto de la vejez, sino como la culminación de trayectorias residenciales caracterizadas por la desigualdad. Puede afirmarse, por todo ello, que el sistema de bienestar no está dando respuesta a las necesidades residenciales no cubiertas en la vejez, siendo un impedimento para su integración social. Irene Lebrusán Murillo es doctora en Sociología por la Universidad Complutense de Madrid. Su tesis doctoral fue galardonada con el Premio de Investigación en Economía Urbana 2017 del Ayuntamiento de Madrid. En la actualidad es investigadora posdoctoral en la Universidad de Harvard (Distinguished RCC postdoctoral at Harvard). Se centra especialmente en la vivienda y la desigualdad desde una perspectiva comparada internacional. Desde 2009 ha sido investigadora en proyectos tanto nacionales como internacionales sobre diferentes temas relacionados con la ciudad, la desigualdad y las políticas públicas, destacando especialmente la atención a la vejez, la infancia y las mujeres inmigrantes. Ha publicado sobre estos temas en diferentes libros y revistas especializadas. Ha sido, asimismo, investigadora visitante en el Centre for Innovative Ageing de la Universidad de Swansea (2014) y colabora con prestigiosos grupos de investigación en España, Estados Unidos, Reino Unido, Finlandia y Uruguay. Tiene experiencia docente en cursos de grado y posgrado en diferentes universidades (Universidad Complutense de Madrid, Universidad Carlos III de Madrid, University of Syracuse, Universidad Autónoma de Madrid, Universidad Politécnica de Madrid), así como en entorno no académico. De sus investigaciones se han hecho eco diferentes medios de comunicación locales y nacionales.