La extracción de carbón lleva asociada la generación de millones de toneladas de residuos arcillosos que son habitualmente acumulados en las proximidades de la mina, creando un peligro para su entorno y un importante desaprovechamiento de recursos. La revalorización de estos residuos (denominados "estériles de carbón") como materia prima para la obtención de puzolanas supondría una gestión más sostenible de los mismos, al mismo tiempo que contribuiría a resolver los problemas de escasez de puzolanas tradicionales a los que se enfrenta actualmente el sector cementero. Este trabajo evalúa la aptitud de los estériles de carbón para su empleo como puzolanas tras ser activados térmicamente, y estudia la viabilidad científico-técnica de los cementos binarios resultantes de la adición del residuo activado en niveles de sustitución del 20 % y 50 %. Los resultados obtenidos muestran que los estériles de carbón activados presentan una buena actividad puzolánica y que los cementos binarios estudiados cumplen con los requisitos físicos establecidos por la normativa europea, aunque experimentan pérdidas en sus resistencias mecánicas. Asimismo, se ha observado que los cementos elaborados con un 20 % de residuo activado presentan características durables similares o superiores a las de un cemento Portland ordinario. No obstante, para niveles de sustitución del 50 %, existen importantes cambios en las propiedades durables, que condicionarían su uso al tipo de ambiente previsto. Adicionalmente, estos cementos presentan ventajas significativas en términos de ahorro energético y reducción de emisiones de CO2, dando lugar a materiales afines con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Economía Circular.