11 de marzo de 2004. Entre las 7.37 y las 7.40 de la mañana, diez bombas estallan en cuatro trenes de Cercanías en Madrid. Poco después de las explosiones, Ignacio Orovio estaba allí cubriendo la noticia para su periódico; ese mismo día comenzó a escribir esta novela. Los inculpados narra desde la ficción cómo un periodista aborda el horror de un atentado, a la vez que recrea a través del personaje de Ismael Feres el claroscuro de un musulmán, licenciado en Derecho, que es amigo de alguno de los terroristas. Que sabe pero no sabe, que sospecha y bascula entre el rechazo, la necesidad de pertenencia y el mirar hacia otro lado. De fondo, y de manera inevitable, el proceder de los políticos, las inminentes elecciones generales y la fractura entre los partidos.