Con el presente libro se ha pretendido favorecer un espacio de encuentro entre el judaísmo y el cristianismo. No tanto en clave de simple reflexión, sino queriendo ir más allá, adentrándonos en algo de esa esencia espiritual que germina en el contexto de las religiones. Lo que podríamos denominar la vivencia esencial y existencial, que apunta al encuentro con el Dios Misterio Presente. Hacer dialogar a la mística judía con la cristiana, o mejor, la tradición cabalista judía con la mística teresiana cristiana, es adentrarse en el ámbito de la experiencia mística cualificada, que, además de surgir en contextos históricos y geográficos similares, encuentran raíces teóricas y prácticas que las unen en un diálogo que va más allá de los conceptos y las formas.