La noche de Navidad es sin duda uno de los momentos más especiales del año, para los cristianos y, por qué no reconocerlo, para lo no cristianos. Sin embargo, la brevedad del tiempo de Navidad, junto con el ajetreo propio de este tiempo de celebraciones y regalos, puede llevarnos a veces a no ser conscientes de la importancia y la profundidad de este misterio central en la experiencia de fe cristiana. Este volumen pretende ayudar a los lectores a tomarse un respiro en medio de las luces y los villancicos. Pretende ser una ventana abierta a la que asomarnos y respirar el intenso aroma de la Navidad. Un balcón abierto en San Pedro en el que los últimos papas, desde Pablo VI a Francisco, sean guías, testigos privilegiados, en nuestra visita al pesebre. Donde descubriremos la soberana pobreza de Dios que, hecho infante, nos deja sin palabras, arrodillados y cautivados por su sonrisa, enternecidos ante su fragilidad.