«Mucho se ha dicho, escrito y hecho sobre la "Regla" de san Benito. De entre todo ello se encuentra lo que la prueba del tiempo ha calificado como bueno y bello. ¿Será una osadía pretenciosa y tonta añadir algo más a lo ya conseguido? El intento es otro: poner belleza al texto de la "Regla", y expresar con ello ese poso de esencialidad y vida, acogido en el caminar cotidiano, bajo su magisterio». (De la Presentación, M. M.ª Concepción Fanjul Camporro, Abadesa del Monasterio de Benedictinas de Alba de Tormes). Esta edición de la "Regla" de san Benito va dedicada a los padres y madres de todas las monjas de esta Comunidad: unos viven en el cielo, otros peregrinan en la tierra; pero todos ellos nos han en-gendrado a la vida, y han depositado en nosotras la semilla de la fe y la esperanza cristianas. Estos cimientos sólidos y profundos han colaborado, sin casi ellos saberlo, a nuestra opción por el camino de la vida monástica; vocación enraizada en la fe, sostenida por la esperanza, y hecha presencia viva en la Iglesia con esa actitud de escucha a la Palabra de Dios, que san Benito nos invita al princi-pio del Prólogo, y la práctica verdadera de la sentencia final (RB 72), que viene a resumirlo todo: Nada absolutamente antepondrán a Cristo» (De la Dedicatoria y Agradecimiento, Hna. M.ª Paz Mateos Miñambres, OSB).