Libro útil y provechoso en el marco de la Escuela de Padres. Invitación a practicar la reflexión, el diálogo y la transparencia, porque la buena educación comienza por los padres, los dos. Para dar, primero hay que tener. Los padres han de descubrir la necesidad de formarse, de aprender de otros compartiendo ideas y experiencias. Con un buen bagaje de vivencias, recursos y conocimientos podrán llegar a los hijos con mayor facilidad.