Este libro puede ser considerado como un libro de arte, pero también de historia. Por un lado, reproduce, con una calidad extraordinaria, gran cantidad de iconos bizantinos. Por otro lado, examina desde diversos ángulos y según un método rigurosamente científico los iconos realizados entre los siglos VI y XV, es decir, a lo largo de toda la época bizantina. El resultado es un hermoso e interesante libro que ayuda a comprender la naturaleza y la función del icono, su iconografía y la evolución de la imagen en los comienzos de la era cristiana.