¡Qué vergüenza! Preguntar en clase, leer en público, ir a clase de baile en vez de jugar al fútbol... todo ello hace que Marta, Curro y Martín dejen de disfrutar de las cosas que les podrían hacer felices por miedo a hacer el ridículo. Clara les ayudará a ver que la vergüenza es un gigante al que ellos mismos alimentan y que entre los cuatro pueden hacerlo encoger.