“Desde mi doble condición de teóloga y activista reclamo la teología del grito. Porque los excluidos y excluidas no son mudos. Tienen voz. Gritan con sus bocas, en diversidad de acentos y lenguas, y cuando estas son acalladas siguen haciéndolo con la palabra de sus cuerpos”. Pepa Torres Pérez habla con una voz propia y franca del día a día en su barrio, Lavapiés. Nos cuenta el sufrimiento de los migrantes, de los manteros, de las mujeres... en una sociedad, la española, que no es tan inclusiva ni tan justa como nos gusta creer. Una lectura que anima a unirse a un grito global que clame por la equidad, la libertad y la justicia.