Las mujeres han sido invisibilizadas durante siglos tanto en la sociedad como en la Iglesia, y esta situación no puede tolerarse más. Es necesario, pues, buscar caminos de transformación para que el protagonismo y la participación total de las mujeres permita un mundo más pleno, donde la igualdad permita la diversidad y esta no constituya diferencias discriminatorias o subordinadas. Esta obra pretende contribuir a esa transformación desde una reflexión antropológica y teológica que, asumiendo la realidad de la mujer en la sociedad y en la Iglesia, la ilumine desde las contribuciones del magisterio y de la teología sistemática para proponer la igualdad de género sin negar las diferencias sexuales.