Este libro está hecho con jirones de vida. Y a la luz de la conversación y de la mirada siempre despierta de quien escribe y describe hoy su caminar. El autor -José Moreno, Pepe o simplemente Pepe el cura- comparte hoy, con estas letras, un paseo por los ojos abiertos del espíritu a lo largo de un año litúrgico. La Palabra que se lee en el ambón dominical no es otra cosa que la esencia de lo que se vive en las calles y plazas, en las aulas, en los salones de los centros de acogida, en los pasillos de las residencias o en la hora oscura de los hospitales. El autor lo sabe, porque lo ha visto, y hoy lo muestra para quien quiera vivir con él la experiencia de que el Evangelio no es verdad por ser Evangelio, sino más bien al contrario: es Evangelio porque es verdad en la vida.