Si siempre es difícil predecir cómo van a evolucionar las cosas en el futuro, más difícil aún resulta en estos momentos de labilidad cultural y de "imperio de lo efímero". Consciente de ello, lo que intenta Juan Antonio del Val no es predecir, sino -como afirma monseñor Díaz Merchán en el prólogo- "estimular la feflexión y buscar en lo posible una orientación dentro de nuestra cultura-ambiente, que, como constatamos cada día, se mueve con un ritmo de cambio acelerado". "El lector -prosigue el arzobipo de Oviedo- quedará enriquecido con los planteamientos que ofrece esta obra, la cual no oculta los desafíos y dificultades, pero tampoco deja de mover a la mente a buscar los aspectos positivos en que puede apoyarse el cristiano para vivir en coherencia con su fe y con su tiempo". Haciendo uso de las aportaciones de la sociología, del pensamiento científico, filosófico, teológico, pastoralista, histórico..., monseñor del Val nos ofrece, desde la atalaya de su gozoso retiro y de su dilatada experiencia como pastor de la Iglesia, una obra -prácticamente un manual- de inequívoca intención pastoral, dirigida a todo tipo de cristianos y a toda persona de buena voluntad.