«¿Quién eres tú?». Esta es la pregunta que los judíos plantean a Jesús en Jn 8, 25; una pregunta que todavía hoy en día muchas personas se hacen. No son pocas las ocasiones en las que este interrogante viene acompañado de otro muy similar: «¿Quién es Dios?». Como autor judío del siglo I que conoció y aceptó el mensaje de Jesús, Juan también tuvo que plantearse ambas cuestiones. Para responder, en su evangelio reinterpreta los temas de la creación y del Dios creador, temas que le sirven para pensar teológicamente la identidad de Dios, la de Jesús y la de sus seguidores, los cuales, al ser hechos hijos en el Hijo, tienen como misión trabajar para que el mundo crea.