En el drama Don Francisco de Quevedo (1848), el dramaturgo arevalense Eulogio Florentino Sanz (1822-1881) se hace eco de las causas de la caída del Conde-Duque de Olivares. Se basa Sanz en varios documentos manuscritos e impresos y en este aspecto la obra puede ser considerada un drama histórico. La ficción reside en el papel del personaje Quevedo como agente directo de la caída del valido y en el amor imposible entre la infanta Margarita de Saboya y el satírico escritor. Quevedo es el verdadero personaje poético creado por Sanz que da unidad al drama. Con esta edición crítica se publica por primera vez el texto completo de Don Francisco de Quevedo, tal como su autor lo concibió para la representación y como lo preparó para la imprenta.