Este libro quiere servir como material de clase para estudiantes y lectores habituados a la escritura filosófica. A este propósito responden el estilo y la estructura adoptados: se da prioridad a la voz de los pensadores en sus textos y se prescinde, salvo en contadas ocasiones, de los ecos, de los comentadores y de las interpretaciones. Se trata de acompañar el ejercicio del pensamiento, reconociendo las limitaciones que nacen tanto de los problemas como de la escritura y autoridades con las que dialoga cada planteamiento; pero, sobre todo, se trata de aprender a pensar el propio tiempo con estos filósofos, para poder dar nueva vida a los principios que rigen nuestro trato con la realidad.