El eminente medievalista ofrece un cuadro vivo de León hace mil años. Con gran sensibilidad se mezcla con sus gentes, las escucha, convive con ellas. Y escribe una historia palpitante. ¿Cómo era una ciudad medieval? ¿Cómo discurría la vida de sus ciudadanos en el mercado, en la corte, en el hogar? Sánchez-Albornoz, uno de nuestros más prestigiosos medievalistas, ofrece aquí un retrato de la ciudad de León hace mil años, y logra introducir en ella al lector de una manera sorprendente penetrando en el tiempo, dialogando con personajes corrientes que existieron, y mostrando así sus modos de pensar y sus costumbres.