En las palabras del propio Julio Caro Baroja, «varios y muy distintos temas son los que aquí se tocan, tomando el arte como un órgano de conocimiento tan importante como la ciencia, porque nos ilumina de modo fabuloso el mundo de las ideas, creencias y costumbres de los hombres».
Estas reflexiones se agrupan en tres partes : en la primera, Caro nos da una amplia visión teórica acerca de la expresión plástica ; en la segunda, habla del paisaje y la arquitectura, y del paisaje romántico español, en la tercera, aborda asuntos artísticos varios (los belenes, la caricatura, el costumbrismo) «desde el punto de vista de un etnógrafo modesto», pero, aunque modesto, «el que contempla a las obras de arte (…) observa a veces cosas que acaso ni al artista mismo ni al crítico le interesan demasiado, o que incluso desprecian».