Rezar desde la vida. Desde lo que vivimos y desde nuestro mundo. Desde nuestras ilusiones y sufrimientos, y desde las de los demás. Desde experiencias muy variadas, que podemos hacer nuestras.
Rezar desde la vida. Desde lo que vivimos y desde nuestro mundo. Desde nuestras ilusiones y sufrimientos, y desde las de los demás. Desde experiencias muy variadas, que podemos hacer nuestras.