Esta obra ofrece al lector un interesante recorrido histórico, acompañado de su correspondiente reflexión, articulado por una preocupación muy actual: los laicos en la vida de la Iglesia. Es muy general la impresión de que los laicos ocupan un papel poco significativo en la Iglesia, por eso conviene asomarse a la historia para conocer mejor cómo se ha ido fraguando y desarrollando la sedimentación estamental en el cuerpo eclesial y la marginación real de la inmensa mayoría de sus componentes.