Los «Consejos evangélicos» o «Directorio» es el texto más meditado y orado de Carlos de Foucauld, el gran testigo del evangelio que, a comienzos del siglo XX, se consagró por entero a los tuaregs, estudiando su lengua y sus costumbres, y procurando su bien material y espiritual. Después de haber constatado que su deseo en vida de fundar una congregación religiosa era difícil de materializar, quiso lanzar con estos «Consejos evangélicos» o «Directorio» un movimiento misionero «profético» para los nuevos tiempos que nos toca vivir, que englobara tanto a obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas como a laicos unidos por el lazo espiritual de la «comunión de los santos». Para realizar este proyecto que él mismo encabezó en vida, nos pide, a todos los que queremos seguir sus huellas, leer y releer, orar y meditar, por lo menos una vez al año, estos Consejos evangélicos, que nos remiten a nuestro muy querido y amado Señor Jesús de Nazaret.