El papa Francisco ofrece esta reflexión sobre el ministerio ordenado de los sacerdotes como una herramienta para la misión y como un instrumento para el discernimiento cotidiano en la vida de los pastores del pueblo de Dios. En estas cuatro cercanías aparecen las ver- daderas «pertenencias» que configuran el propio ser del ministro ordenado y pastor. La propia espiritualidad del ministerio encuentra en ellas una fuente viva y verdadera de la cual beber. La teología del ministerio se ve enriquecida y estimulada por esta reflexión que el papa Fran- cisco nos ofrece desde su experiencia vital y «aterrizada» como sacerdote.