Con el título de “El Camino” se pretende evocar tanto el carácter del discipulado como el tono de las enseñanzas que el Maestro fue entregando a los suyos. De hecho, el camino es un tema recurrente en el tercer evangelio, desde el itinerario de María para visitar a su pariente Isabel, hasta el camino de Emaús, en que Jesús acompaña a dos de sus discípulos. Meditar el evangelio de Lucas en este ciclo litúrgico C, nos lleva hoy a preguntarnos por la dirección de nuestros caminos, por la decisión con la que los emprendemos y por la compañía que aceptamos a nuestro lado.