"Quiero expresar con dolor –recuerda el papa Francisco– que la peor discriminación que sufren los pobres es la falta de atención espiritual. La inmensa mayoría de los pobres tiene una especial apertura a la fe". Los pobres piden y los pobres dan. Ellos enseñan mucho porque, detrás de sus vidas azarosas y heridas, brilla el resplandor de Cristo que se ha hecho pobre y ha venido a evangelizar a los pobres. Dios actúa más en aquellos que le claman día y noche. En estas páginas se nos anima a que crucemos el puente que nos puede unir a los demás, a los que sentimos alejados, a los que nos cuesta tratar, a los que nuestra sensibilidad rechaza, a los que nos parecen perdidos, a los que no nos gustaría que nos metan en nuestra casa, a los que nos dan lástima pero por los que no hacemos nada al pasar a su lado. El misterio del otro nos espera, tan solo falta dar el primer paso. José Manuel Horcajo nació en Madrid en 1974. Ingresó en el Seminario Conciliar de Madrid en 1995 después de cursar tres años de Ingeniería Industrial. Se ordenó sacerdote en 2001. Fue nombrado párroco de San Ramón Nonato en 2009, ministerio que ejerce en la actualidad además de ser capellán de un colegio y una residencia. Doctor en teología por la Universidad de San Dámaso, donde imparte clases de moral. Es colaborador habitual en el semanario Alfa y Omega (ABC). Ganador del premio a la Caridad en Acción otorgado por Religión en Libertad (septiembre de 2018) y del premio a la Pastoral Social de la Universidad Francisco de Vitoria (octubre de 2018).