El corazón de Jesús la te ya con fuerza en Valdediós y nos llena de vida, de alegría, de fuerza y de amor. Y pretendemos romper todos los diques y todas las trabas para que abarque todo Asturias y el mundo entero en su abrazo vivificador. Esa es nuestra pelea y con esa finalidad... hablamos, cantamos, recibimos huéspedes... y si hace falta bailamos y nos apuntamos a un bombardeo. Tranquilidad en el graderío: esto no significa que voy a escribiros unos rollos teológicos y catequéticos que os sean útiles para recoger el sueño en cuanto se lee el primer párrafo. No tengo vocación de somnífero, sólo de gritona del amor de Dios. Mi intención es reflexionar sobre las cosas del día a día de cualquier ser humano... Lo cotidiano vivido desde el fondo del corazón es lo que da sabor a esta vida. Os doy mi palabra de que no nos vamos a aburrir y vamos a intentar ir caminando por ese maravilloso mundo interior que muchas veces ni siquiera sospechamos.