El título de este libro es evocador: Escucha su latido. Jesús era todo amor, todo bondad, todo corazón y san Juan tuvo la gran suerte de escuchar su latido. Muchos se acercan fríamente a los evangelios desde la mente, sin corazón y, por lo tanto, no pueden escuchar el latido amoroso del Maestro. Quien se encuentra con él, quien opta por él, entra en un nuevo estilo de vida y acepta los valores y criterios del reino. Los cristianos, cuyas vidas deben amoldarse a la de Jesús, han de preguntarse con frecuencia por la identidad de Jesús, para no fabricarse un Jesús falso y responder a las preguntas, a las angustias y esperanzas de los pueblos. Cristiano es el que sigue a Jesús y opta por el amor y la vida. A todos aquellos que se preguntan si es cierto que hoy Jesús vive entre nosotros, les respondería: abrid los ojos y ved la cantidad de personas que van por la vida escuchando el latido de los demás y abriendo el corazón a sus necesidades. Dios sigue hablando y lo hace a través de su Hijo, de los otros y de la misma naturaleza. ¡Dichos los que escuchan su latido!