Obsesiones y esperanzas de los jesuitas españoles expulsos: El P. Vicente Olcina (1767-1809)
Cuando en 1767 miles de jesuitas españoles, americanos y filipinos marcharon a un exilio forzoso, eran conscientes de que aquello cambiaría sus vidas. En Córcega primero y en Italia después, su destierro acabó durando casi cincuenta años ya inmensa mayoría nunca regresaría. Por lo que dejar constancia del exilio se convirtió en una necesidad vital, colectiva e individual.
Obsesiones y esperanzas de los jesuitas españoles expulsos: El P. Vicente Olcina (1767-1809)