En el umbral del tercer milenio, el mundo se asoma con terrible ignorancia al Apocalipsis anunciado por San Juan. Ha sonado la primera trompeta, la señal del fin de los tiempos. Desde un remoto rincón de Palestina, el Padre Elías, un humilde fraile carmelita, judío converso y superviviente del Holocausto, será llamado por el mismo Papa para emprender una misión de proporciones históricas para el destino de la Iglesia y de la humanidad: deberá buscar al anticristo, encarnado en un poderosísimo personaje de la política mundial cuyo mensaje de unión entre los pueblos y de paz universal esconden un único propósito: la derrota de Cristo. Es necesario mover a este hombre al arrepentimiento y así poder aplazar el momento de la Gran Tribulación y ganar el tiempo suficiente para predicar el Evangelio en el mundo entero. A medida que conoce mejor la verdadera naturaleza del adversario, Elías se reencontrará con los fantasmas de su propio pasado, y la red tejida por el mal empezará a cerrarse en torno a él con traiciones, persecuciones y asesinatos, amenazando aquello que más quiere. Pero Dios no abandona a sus hijos, y con las únicas armas de que dispone - el amor, la fe, la esperanza y el perdón -, el Padre Elías no se rendirá al destino de su misión.