«Amad el silencio: es fuente de todas las virtudes, de la paz interior del corazón». Pablo de Obnora La «santa Rusia» no es santa porque los rusos sean moralmente mejores que otros pueblos; lo es porque desde lo profundo de la tierra rusa se eleva siempre una voz imperceptible, silen-ciosa y casi ahogada, un deseo de santidad y de unión con Cristo. Este librito, en forma de breves aforismos, recoge algunas de estas «voces» (Serafín de Sarov, Silvano del Monte Athos, Florenski, Tolstoi, Dostoyevski…) que hablan de pureza del corazón, vida eterna, tristeza, pasión y resurrección de Cristo, unidad y belleza, etc. El autor ofrece para cada «voz» una breve meditación para entenderlas en el contexto en que nacieron. Nos ayudarán a penetrar en el misterio de Cristo, a comprender cuál es la verdadera idea de los pueblos en un tiempo en que se busca la unificación de Europa y del mundo. Tomáš Špidlík, jesuita, nació en 1919 en Moravia (República Checa), realizó estudios de fi-losofía y teología en diversas universidades europeas, fue profesor emérito del Pontificio Insti-tuto Oriental y desde 1991 vivió y trabajó en el Centro Aletti. Conocido y apreciado en todo el mundo como estudioso de teología espiritual patrística y oriental, fue creado cardenal por Juan Pablo II en 2003. Falleció en Roma el 16 de abril de 2010.