François-Xavier Nguyen Van Thuan nació en una familia vietnamita de hondas raíces cristianas, comprometida con la Iglesia y con la sociedad. Nunca dejó de hablar de esperanza, ni siquiera durante los trece largos años que pasó en prisión. En medio de una noche espiritual, cultivó su amor a Jesús amando a su prójimo, incluso a sus enemigos, que quedaban impactados por su amistad sincera, su serenidad y su fe. El P. Stefaan Lecleir lo conoció personalmente. Para escribir esta biografía se ha basado fundamentalmente en los recuerdos, vivencias y anécdotas relatados por Élisabeth, la hermana menor del cardenal y uno los últimos testigos directos de su vida, además de otros testimonios. La sencillez y humildad de este testigo de la fe representan un modelo de evangelización para el mundo actual.