Tango ha conseguido unas salchichas para chuparse los dedos y, como no tiene mucha hambre, decide esconderlas para saborearlas
más tarde. Pero su idea le va a dar muchos quebraderos de cabeza. ¡Apenas encuentra un escondite y se cruza con
alguien
Tango ha conseguido unas salchichas para chuparse los dedos y, como no tiene mucha hambre, decide esconderlas para saborearlas
más tarde. Pero su idea le va a dar muchos quebraderos de cabeza. ¡Apenas encuentra un escondite y se cruza con
alguien