Esta obra fundamental de René Girard constituye en la actualidad un reto cultural y filosófico impostergable.
En un vasto examen que adopta la forma de un diálogo con los psiquiatras Oughourlian y Lefort, el autor analiza, a partir de un cuidadoso análisis de importantes documentos de índole antropológica, psicológica y religiosa, los mecanismos que están a la base de toda interacción social.
El resultado es una teoría unificada que sitúa el fenómeno de lo sagrado en el centro mismo de lo humano. Girard nos advierte sobriamente tanto sobre el papel central de la violencia en la constitución de toda cultura como sobre el peligro que su propagación sin límites entraña.