Entre los sucesos más influyentes de finales del siglXX está la llamada revolución del 68: dio lugar a una generación, los sesentayochistas, que nos ha gobernado hasta hoy. Hay quien piensa que lo ocurrido en 1989, el hundimiento del socialismo real, tiene derecho a competir con el 68, pero los últimos años parecen confirmar la mayor hondura y trascendencia del cambio de los sesenta. Puede que el aparente fracaso político de aquellos hechos haya engañado a algunos, pero no hubo fracaso, sino efecto retar- dado. En cuanto a la relación con la cultura woke, cualquier análisis histórico selecciona algunas causas para crear una narración razonable de los hechos, sin que se pueda alcanzar una explicación exhausti- va ni de estos ni de sus orígenes ni pueda tomarse esa explicación por única o definitiva.