Hace ya más de una década que el adjetivo transformador se utiliza cada vez con mayor frecuencia para describir el tipo de educación que la sociedad necesita, como si la educación no fuera en sí un acto de transformación, de cambio para el educando y para el educador. Al tiempo que se extiende esta perspectiva en la educación, ha surgido un conjunto copioso de investigaciones teóricas y aplicadas sobre la educación transformadora. En el ámbito práctico de la educación, la búsqueda de una participación de los estudiantes ha provocado muchas conversaciones sobre metodologías educativas, ya que se suele afirmar que los enfoques tradicionales, centrados en la absorción pasiva de información, deben ser objeto de escrutinio. En este panorama han surgido varios medios pedagógicos transformadores que fortalecen a los estudiantes para abordar los desafíos sociales cultivando un sentido de responsabilidad cívica, de modo que se sumerjan en problemas del mundo real y promuevan cambios positivos dentro de sus comunidades. Este libro querría ser una llamada a la reflexión y a la acción, tanto para educadores como para profesores, administradores y formuladores de políticas educativas, ya que la educación transformadora abarca múltiples ámbitos socioeducativos: la felicidad y el bienestar, la salud física y la mental, el sentido y el propósito, el carácter y la virtud, las relaciones interpersonales. En sus páginas, once especialistas en teoría de la educación, que proceden de nueve universidades diferentes, aspiran a proporcionar, desde distintos planteamientos, una hoja de ruta que aproveche el potencial transformador de la educación en diversos niveles y entornos educativos, puesto que la educación es un proceso de transformación de las personas que repercute en la mejora del mundo.