¿Qué hacemos cuando amamos? Esta pregunta, que ya en sus Confesiones se hacía Agustín de Hipona, no ha dejado de interrogar a la tradición filosófica y teológica de occidente a lo largo de los siglos. Guillermo de Saint-Thierry, monje benedictino del siglo XII, elaboró una reflexión profundamente original sobre el sentido último del fenómeno amoroso que muestra cómo el cristianismo va más allá del pensamiento clásico a la hora de plantear el sentido último de la realidad, que no es sino el Dios Trinidad que comunica su amar a todos los hombres llamándolos a vivir de ese mismo amor. El presente estudio pretende articular la reflexión de Guillermo de Saint-Thierry sobre el fenómeno amoroso como una relectura de la tradición agustiniana que supera los límites del pensamiento de san Agustín y de las figuras griega y hebrea del amor para poner el énfasis en la noción de relación. A partir de esta noción y del dinamismo del amar se plantean cuestiones como la definición de persona, su naturaleza relacional y la importancia de la apertura a la alteridad para penetrar en la entraña de la realidad, lo que permitirá hablar del amar como el logos de dicha realidad. Esta conclusión se alcanza en diálogo con autores contemporáneos cuya reflexión se acerca e ilumina la de Guillermo de Saint-Thierry, mostrando su vigencia y actualidad.