Un libro que intenta dar voz a los sentimientos que el corazón experimenta cuando escuchamos la palabra de Dios.
A través de distintos versículos de los cuatro evangelistas, la autora reflexiona, poema a poema, sobre el mensaje de Jesús.
El encuentro con el prójimo lleva unido el descubrimiento del dolor en el mundo. Jesús nos enseña a afrontar el sufrimiento, tanto el nuestro como el de los demás; de sus labios siempre escucharemos palabras de sabiduría, de perdón, de misericordia y
de amor incondicional.
"He querido, inspirándome en el Evangelio, imaginar las palabras que Jesús nos dirigiría a cada uno de nosotros. Ojalá que estas páginas iluminen al lector y le acerquen a la fuente más hermosa que tenemos los cristianos, que es el Evangelio".